Los diferentes premios Nobel de la Paz han reivindicado una implicación decidida de la comunidad internacional en la acogida y atención de personas refugiadas del conflicto bélico sirio. No se sabe, muy bien, el peso que puede llegar a tener un referente de esta naturaleza en las decisiones políticas. Pero, el llamamiento ya está hecho. No tiene vuelta atrás. Han sido todos y no solo un verso suelto. Por lo tanto; las excusas de saldo, de atribuir esta lógica opinión a un reducido grupo de personas, carecen del más mínimo sentido.